22/4/15

Obama advirtió a Irán que EEUU "garantizará la libertad de navegación" en el Golfo Pérsico


El mandatario alertó al gobierno persa ante su posible ayuda con armas a los rebeldes hutíes en Yemen. El portaaviones Theodore Roosevelt se unió a otros nueve buques de guerra norteamericanos en el golfo de Adén





El presidente Barack Obama alertó este martes a Irán ante su posible ayuda a los rebeldes hutíes en Yemen y aseguró que la armada de Estados Unidos garantizará "la libertad de navegación" en la región del golfo Pérsico.

En una entrevista en la cadena MSNBC, Obama se refirió a los barcos iraníes que actualmente se encuentran en aguas internacionales pero que algunas informaciones apuntan que podrían dirigirse a Yemen para proveer de armas a los rebeldes.

"Existe una razón por la que mantenemos algunos de nuestros navíos en la región del golfo Pérsico y esa es garantizar que mantenemos la libertad de navegación", indicó Obama.

"Lo que les hemos dicho (a los iraníes) es que si se entregan armas a facciones en Yemen que pueden amenazar la navegación, eso es un problema", prosiguió el mandatario estadounidense.

Según Obama, una posible implicación de Irán en el conflicto yemení dificultaría los esfuerzos para encontrar una solución política al problema.

Por su parte, Irán niega las acusaciones que realizan algunos países árabes de estar detrás del conflicto en Yemen, sumido en una guerra abierta entre el movimiento chií de los hutíes y las milicias leales al presidente yemení, Abdo Rabu Mansul Hadi.

Por otro lado, la Casa Blanca se mostró este martes complacida por el fin de las operaciones aéreas y los bombardeos por parte de la coalición árabe suní a los rebeldes hutíes en Yemen.

La coalición, liderada por Arabia Saudí (aliado de EEUU) consideró que ya ha alcanzado su objetivo de eliminar el potencial militar de los chiíes y frenar la amenaza a la seguridad regional.

"Seguimos apoyando la reanudación de un proceso político con mediación de la ONU y el envío de asistencia humanitaria", indicó el vocero de del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Alistair Baskey.

8/4/15

Carta de la Naciones Unidas convenios Internacionales




CAPÍTULO VII: ACCIÓN EN CASO DE AMENAZAS A LA PAZ, QUEBRANTAMIENTOS DE LA PAZ O ACTOS DE AGRESIÓN

Artículo 39

El Consejo de Seguridad determinará la existencia de toda amenaza a la paz, quebrantamiento de la paz o acto de agresion y hará recomendaciones o decidirá que medidas seran tomadas de conformidad con los Artículos 41 y 42 para mantener o restablecer 1a paz y la seguridad internacionales./p>

Artículo 40

A fin de evitar que la situación se agrave, el Consejo de Seguridad, antes de hacer las recomendaciones o decidir las medidas de que trata el Artículo 39, podrá instar a las partes interesadas a que cumplan con las medidas provisionales que juzgue necesarias o aconsejables. Dichas medidas provisionales no perjudicarán los derechos, las reclamaciones o la posición de las partes interesadas. El Consejo de Seguridad tomará debida nota del incumplimiento de dichas medidas provisionales.

Artículo 41

El Consejo de Seguridad podrá decidir qué medidas que no impliquen el uso de la fuerza armada han de emplearse para hacer efectivas sus decisiones, y podrá instar a los Miembros de las Naciones Unidas a que apliquen dichas medidas, que podrán comprender la interrupción total o parcial de las relaciones económicas y de las comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales, telegráficas, radioeléctricas, y otros medios de comunicación, así como la ruptura de relaciones diplomáticas.

Artículo 42

Si el Consejo de Seguridad estimare que las medidas de que trata el Artículo 41 pueden ser inadecuadas o han demostrado serlo, podrá ejercer, por medio de fuerzas aéreas, navales o terrestres, la acción que sea necesaria para mantener o restablecer la paz y la seguridad internacionales. Tal acción podrá comprender demostraciones, bloqueos y otras operaciones ejecutadas por fuerzas aéreas, navales o terrestres de Miembros de las Naciones Unidas.

Artículo 43

  1. Todos los Miembros de las Naciones Unidas, con e1 fin de contribuir al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, se compremeten a poner a disposición del Consejo de Seguridad, cuando éste lo solicite, y de conformidad con un convenio especial o con convenios especiales, las fuerzas armadas, la ayuda y las facilidades, incluso el derecho de paso, que sean necesarias para el propósito de mantener la paz y la seguridad internacionales.
  2. Dicho convenio o convenios fijarán el número y clase de las fuerzas, su grado de preparación y su ublicación general, como también la naturaleza de las facilidades y de la ayuda que habrán de darse.
  3. El convenio o convenios serán negociados a iniciativa del Consejo de Seguridad tan pronto como sea posible; serán concertados entre el Consejo de Seguridad y Miembros individuales o entre el Consejo de Seguridad y grupos de Miembros, y estarán sujetos a ratificación por los Estados signatarios de acuerdo con sus respectivos procedimientos constitucionales.

Artículo 44

Cuando el Consejo de Seguridad haya decidido hacer uso de la fuerza, antes de requerir a un Miembro que no éste representado en él a que provea fuerzas armadas en cumplimiento de las obligaciones contraídas en virtud del Artículo 43, invitará a dicho Miembro, si éste así lo deseare, a participar en las decisiones del Consejo de Seguridad relativas al empleo de contingentes de fuerzas armadas de dicho Miembro.

Artículo 45

A fin de que la Organización pueda tomar medidas militares urgentes, sus Miembros mantendrán contingentes de fuerzas aéreas nacionales inmediatamente disponibles para la ejecución combinada de una acción coercitiva internacional. La potencia y el grado de preparación de estos contingentes y los planes para su acción combinada seran determinados, dentro de los límites establecidos en el convenio o convenios especiales de que trata el Artículo 43, por el Consejo de Seguridad con la ayuda del Comité de Estado Mayor.

Artículo 46

Los planes para el empleo de la fuerza armada serán hechos por el Consejo de Seguridad con la ayuda del Comité de Estado Mayor.

Artículo 47

  1. Se establecerá un Comité de Estado Mayor para asesorar y asistir al Consejo de Seguridad en todas las cuestiones relativas a las necesidades militares del Consejo para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, al empleo y comando de las fuerzas puestas a su disposición, a la regulación de los armamentos y al posible desarme.
  2. El Comité de Estado Mayor estará integrado por los Jefes de Estado Mayor de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad o sus representantes. Todo Miembro de las Naciones Unidas que no éste permanentemente representado en el Comite será invitado por éste a asociarse a sus labores cuando el desempeño eficiente de las funciones del Comité requiera la participación de dicho Miembro.
  3. El Comité de Estado Mayor tendrá a su cargo, bajo la autoridad del Consejo de Seguridad, la dirección estratégica de todas las fuerzas armadas puestas a disposición del Consejo. Las cuestiones relativas al comando de dichas fuerzas serán resueltas posteriormente.
  4. El Comite de Estado Mayor, con autorización del Consejo de Seguridad y después de consultar con los organismos regionales apropiados, podrá establecer subcomités regionales.

Artículo 48

  1. La acción requerida para llevar a cabo las decisiones del Consejo de Seguridad para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales será ejercida por todos los Miembros de las Naciones Unidas o por algunos de ellos, según lo determine el Consejo de Seguridad.
  2. Dichas decisiones serán llevadas a cabo por los Miembros de las Naciones Unidas directamente y mediante su acción en los organismos internacionales apropiados de que formen parte.

Artículo 49

Los Miembros de las Naciones Unidas deberán prestarse ayuda mutua para llevar a cabo las medidas dispuestas por el Consejo de Seguridad.

Artículo 50

Si el Consejo de Seguridad tomare medidas preventivas o coercitivas contra un Estado, cualquier otro Estado, sea o no Miembro de las Naciones Unidas, que confrontare problemas económicos especiales originados por la ejecución de dichas medidas, tendrá el derecho de consultar al Consejo de Seguridad acerca de la solución de esos problemas.

Artículo 51

Ninguna disposición de esta Carta menoscabará el derecho inmanente de legítima defensa, individual o colectiva, en caso de ataque armado contra un Miembro de las Naciones Unidas, hasta tanto que el Consejo de Seguridad haya tomado las medidas necesarias para mantener la paz y la seguridad internacionales. Las medidas tomadas por los Miembros en ejercicio del derecho de legítima defensa serán comunicadas inmediatamente al Consejo de Seguridad, y no afectarán en manera alguna la autoridad y responsabilidad del Consejo conforme a la presente Carta para ejercer en cualquier momento la acción que estime necesaria con el fin de mantener o restablecer la paz y la seguridad internacionales.

EL SÍNDROME DE LA GUERRA DEL GOLFO: CRUEL ENCUBRIMIENTO


9 noviembre 2010 · de respsi · en Toxicología. ·



Desde el final de aquella contienda bélica, unos 100.000 veteranos han participado en los registros y estudios del Departamento de Defensa para hacer un seguimiento de los síntomas y el impacto del síndrome. Una docena de comisiones y multitud de estudios han fracasado en su intento de dar una explicación plausible para el hecho de que tal cantidad de soldados sufran serios trastornos de salud después de haber estado en Kuwait hace 12 años. La mayoría de las comisiones gubernamentales americanas apuntan a que el responsable es el estrés psicológico derivado de tener que enfrentarse a un potencial ataque químico y biológico, pero la explicación no convence a los veteranos. El síndrome de la guerra del Golfo podría quedar como uno de esos misterios médicos sin causa ni cura.

La falta de explicación sobre las causas del síndrome sólo contribuyen a perpetuar el miedo. En la actualidad, con los ejércitos de Estados Unidos y Gran Bretaña todavía desplegados en Irak, miles de soldados y sus familias se preocupan no sólo por las bajas que los enfrentamientos con grupos iraquíes afines a Sadam causan cada día, sino también por los potenciales riesgos para la salud que esas operaciones ha demostrado conllevar. Los que fueron soldados allí hace una década se preguntan si su gobierno habrá aprendido la lección.


Después de la guerra yanqui contra Irak en 1991, docenas de miles de ex combatientes apostados en el golfo Pérsico empezaron a experimentar problemas médicos debilitantes y a veces mortales, entre ellos: fallas del sistema inmunológico, problemas respiratorios, dolores de las articulaciones y de músculos, dolores de cabeza, náusea, vómito, diarrea extrema, mareos, fatiga, pérdida de memoria, llagas, problemas intestinales y del corazón e incluso cáncer. Muchos hijos de los ex combatientes concebidos después de la guerra nacieron con problemas. Cónyuges y niños de ex combatientes también han tenido problemas anormales. Además, soldados de otros países que participaron en la guerra también han sufrido de enfermedades parecidas.
Adulteración de historias médicas

Como informamos el año pasado (OR, No. 821, 3 de septiembre de 1995), las FFAA han tratado de destruir o alterar la información médica para tapar la realidad delsíndrome de la guerra del Golfo . Una orden fechada agosto de 1991 de los marines indica que alterar la historia clínica de los soldados fue una orden: “Varias fuentes han sugerido que la documentación de exposición al humo en la región de Kuwait debe de ser incluida en la historia médica de los soldados. Tal información podría sugerir, falsamente, que habrá problemas de salud en el futuro, mientras que hasta ahora la información no indica que haya peligros. A menos de que haya quejas de salud actualmente, no es necesario poner esto en las historias médicas”.

El periódico Army Times, de noticias de las fuerzas armadas, informó el 25 de abril de 1994 que unos soldados de la Marina la acusaron de hacer desaparecer las historias médicas de marineros enfermos en noviembre de 1991. Los marineros afirman que sus historias médicas prueban que fueron expuestos a agentes químicos o biológicos en el Golfo.

Existen claras pruebas de que funcionarios de alto nivel del gobierno y las FFAA sabían que los soldados fueron expuestos a químicos tóxicos durante la guerra. Pero durante años taparon la verdad. En una carta de 1994, el secretario de Defensa, William Perry, y el jefe del estado mayor, general John Shalikashvili, escribieron: “No hay ninguna información, clasificada o no clasificada, que sugiera que se utilizaron armas químicas o biológicas en el Golfo Pérsico”.

Este cruel encubrimiento ha tenido graves consecuencias para los ex combatientes enfermos. Como el gobierno y las FFAA ni siquiera reconocen oficialmente la existencia del síndrome de la guerra del Golfo muchos no han recibido servicios médicos adecuados. El diagnóstico más común que se les da es que sufren del “síndrome de estrés post traumático”, o sea, que son problemas “mentales”. A muchos les han dado drogas psiquiátricas, como Prozac. A otros les dijeron que tenían que pagar el costo de su tratamiento porque sus problemas “no son una consecuencia del servicio militar”.




Fuente:http://revcom.us/a/firstvol/884/gws_s.htm

7/4/15

El velo nos tapa la cabeza, no la mente





El velo nos tapa la cabeza, no la mente



AIN.- Reivindican su condición de mujeres y de musulmanas. Dos realidades que tienen que conjugar con un entorno marcado por los estereotipos. Además, la comunidad islámica sigue marcando las pautas. Ellas quieren elegir su propio camino.

«Te vi conduciendo y llevabas velo». Esto es lo que le dijo hace poco una mujer en Pontevedra a Fátima Mlibda. Cuando cuenta estas anécdotas no puede evitar sonreír. A Souad Nahil un cliente le empezó a hablar con gestos aún después de que ella se dirigiera a él en un perfecto castellano. Galicia es la tercera comunidad de España con menos residentes musulmanes y, por tanto, con menos musulmanas. Todavía no nos hemos familiarizado con ellas y eso que algunas llevan aquí años.

Tanto los padres de Fátima como los de Souad llegaron de Marruecos a finales de los 80 atraídos por el trabajo en el mar o los transportes. Ellas se sumaron después con sus madres. Son la segunda generación. La que intenta integrarse sorteando los estereotipos de la sociedad receptora y, al mismo tiempo, las fuertes tradiciones que imperan en su entorno.

«Queremos que nos conozcan», cuenta Souad. El rol de la mujer musulmana en Galicia, y en el resto de España, se ha caracterizado por su escasa visibilidad. Hay pocas estadísticas sobre su actividad e influencia. Acostumbran aislarse más en sus comunidades o en sus familias. Un papel que, parece, quieren cambiar. «Llevo aquí desde niña y sé cómo son los gallegos, sin embargo la mayoría no tiene ni idea de cómo soy yo. Estos días estoy asistiendo a un curso que imparte la Cámara de Comercio de Pontevedra. Uno de mis compañeros me ha confesado que nunca pensó que fuera tan inteligente el día que me conoció», dice una todavía sorprendida Souad. Ella tiene ya la nacionalidad española y como otras tantas jóvenes españolas acaba de quedarse en el paro. Comparte piso con su hermana en Vigo, para ahorrar gastos, y se sigue formando.

«Hice un curso de técnico de rayos, trabajé en el departamento de control de calidad de una empresa hasta hace poco y hubo una época en la que incluso compaginé dos empleos». Con 29 años, no se ha casado. «Mis padres me insinúan a veces que lo vaya pensando, pero todavía tengo otros objetivos». Uno de ellos es la asociación Chicas Musulmanas en Galicia.

La acaban de fundar y suman ya unas treinta socias. Fátima es la presidenta. «No queremos dar pena ni que crean que por llevar este velo somos sumisas, que estamos oprimidas. Me cubre la cabeza, no la mente», subraya.

Estos días no paran. Han dado una charla en la Cruz Roja y en la plaza de la Peregrina han colocado mesas informativas. La mayoría están o han estudiado una carrera o un ciclo formativo. Son jóvenes, tienen entre 19 y 30 años. La duda es ¿cuándo se casen podrán seguir haciendo lo mismo? Souad insiste aquí en su autonomía. «Tenemos más independencia de la que pensáis. No nos manda ninguna mezquita ni ningún hombre, esto lo hacemos nosotras».

No se atreve, sin embargo, a definirse como feminista. «Reivindico el papel de las mujeres, gracias a ellas prosperan las sociedades». Fátima incide en lo mismo: «No estamos encerradas en nuestras casas, la prueba es que nos esforzamos por tener un futuro mejor». Es en este momento cuando hace un paréntesis. «Hay mucha confusión con términos como por ejemplo la yihad. Muy pocos saben que su significado en árabe es esfuerzo. Esforzarme es lo que hago yo por estudiar, por buscar trabajo y por ayudar a mis padres, no lo que hacen un grupo de locos».

No son ajenas a las noticias que estos días se repiten. Cada semana conocemos un caso nuevo de jóvenes, entre ellos también mujeres, que son reclutados por el “Estado Islámico” en España. Hay casos en Ceuta y Melilla, pero también en Barcelona, Ávila, Ciudad Real o Badalona, donde han sido detenidos dos hermanos y también sus padres. «Me fastidia que tengamos que pagar por lo que hacen cuatro personajes», remarca Fátima. «Yo, en mis 21 años, no voy a coger y dejarlo todo. Las chicas que están reclutando son la mayoría muy jóvenes e influenciables. Les hacen un lavado de cerebro. Desde luego me dan mucha pena, no saben lo que les espera. ¿Cómo me voy a ir yo a un país que está en guerra como Siria?».

Los atentados contra la revista francesa Charlie Hebdo o contra el Museo del Bardo, en Túnez, han hecho rebrotar la islamofobia. «El problema es que no entienden el Islam, lo interpretan como quieren. A nosotras también nos afecta. Las mujeres también sufren la violencia», dice Salma, una estudiante musulmana de 20 años.

Otra universitaria, Nassima, añade: «Siempre me he sentido muy famosa. Cuando paso la gente se detiene y me mira. Supongo que por curiosidad. Tras el ataque de París hubo unos días en los que las miradas eran diferentes, como atacantes. El viernes de esa semana, después de clase, hice la maleta y me fui a coger el autobús para irme a casa. Lo pasé muy mal. Me puse nerviosa y casi me confundo de parada. Luego, dentro, la radio estaba tan alta? Desde entonces no uso maleta ni mochila, prefiero llevar muchas bolsas. Todo esto es un dolor doble. Por un lado ves que el autollamado “Estado Islámico” mata a gente inocente, incluidos musulmanes y, por otro, te ven como una terrorista». Tras media vida en Galicia, no se plantean regresar al país en el que nacieron sus padres. «Siempre me he sentido integrada, mis amigos son españoles y aparte de alguna que otra anécdota nunca viví ningún tipo de rechazo. Tal vez soy afortunada por vivir en Vigo y no en un pueblo o en una ciudad más grande», opina Souad. Fátima, que ha terminado el ciclo de Comercio y Marketing, asiente. «Nunca voy a olvidar que soy marroquí, pero no tengo pensado volver. Tendría que empezar de cero. Mi vida está aquí».

Nassima sabe que nunca pasa desapercibida. En medio de los pasillos repletos de estudiantes apurados por los exámenes destaca su rostro risueño y sereno. Eso y el velo de un intenso verde que cubre su cabeza. «Soy una de las primeras alumnas en Filología que lo lleva», presume. No se separa de su carpeta de la USC mientras nos cuenta cómo en clase todos los profesores la conocen, «siempre dicen: tú, la que está al lado de Nassima». Estudia Lengua y Literatura Modernas. Pronuncia cada palabra de una forma tan natural que cuesta descubrir en su entonación las señales de su árabe natal. Como la mayoría de musulmanas en Galicia es de Marruecos. Más o menos. Llegó aquí con apenas diez años y cuando le preguntas a qué lugar se siente más vinculada su respuesta no puede ser más galaica. «Depende del día», suelta.

Ella es la primera de su casa que llega a la Universidad. «Para mi madre es un sueño. Si me preguntas a quién admiro más te digo que a ella. Lo dejó todo, su familia, su vida, para darnos un futuro mejor. En Safí nos llegaba con el sueldo de mi padre. Aquí no, es limpiadora», apostilla. En Santiago la primavera no impide que las nubes hagan acto de presencia. Las nubes y la lluvia. «Con el velo, mira, mato dos pájaros de un tiro. Me mojo mucho menos», bromea mientras intenta quitarle importancia a la pregunta que protagoniza la conversación, ¿Por qué el velo? Junto a Nassima nos espera Salma. Está en segundo de Administración y Dirección de Empresas. Ella no lo lleva. Su pelo ondulado se mueve libremente y con un punto de rebeldía que se acompasa con su personalidad. Firme y madura a sus escasos veinte años. «El año pasado empecé a buscar trabajo y el velo era un obstáculo así que decidí quitármelo. En casa me respetaron, dijeron que era mi decisión».

Salma es de Casablanca, aunque vive en Ordes desde niña. «Ir a Marruecos a veces es incómodo. La gente te machaca más, sobre todo en los barrios más periféricos. Aquí me siento más yo. Puedo decir que no me quiero casar y no pasa nada. Allí me dirían que voy por el mal camino». ¿Es el Islam machista? Al formular la pregunta las dos contestan: «No». «Hay que distinguir la religión de la cultura. Los países árabes siempre han sido muy machistas, pero eso no es por el Islam. La educación es fundamental para el progreso. Allí una de mis tías está divorciada y no pasa nada», dice Nassima. «Me gustaría ver avanzar las cosas. Claro que es machista que castiguen a una mujer por poner los cuernos», responde Salma. Se queda un momento pensando y añade: «El Corán también tiene que actualizarse. En la época de Muhammad (P y B) no había universidades. Ahora sí. En mi país también hay cada vez más mujeres en las aulas». Volviendo al yihab, Nassima remarca: «Me lo puse a los 19, justo antes de empezar en la universidad. Ojalá toda Galicia fuera como mi facultad, aquí no me siento tan observada». Sobre su imposición en adolescentes, matiza: «Creo nunca se debería poner antes de los 15 o 16 años, que es cuando empiezas a tener tu propio criterio para decidir lo que quieres. Vérselo a niñas más pequeñas me parece precipitado. Cuando me lo puse mi madre no paró de llorar, no quería que me discriminaran». Los padres de Fátima lo vivieron de forma parecida: «No se lo esperaban. Para mí fue una forma de reafirmarme. Nadie tiene que liberarme de algo que yo he elegido. ¡Y que conste que me gusta mucho arreglarme!», exclama. Quien tiene decidido no recuperarlo es Salma. «Con él era la chica de velo que no salía. Soy marroquí, pero ahora ando con gente de aquí. Mi madre, que no lo llevaba en Casablanca, se lo puso en Galicia para evitar que la juzgaran». Al lado de Marruecos, en Túnez, se acaba de celebrar el Foro Social Mundial en el que ha estado la periodista y experta en el mundo árabe Montserrat Boix. «Túnez acaba de aprobar la paridad en su Constitución. La mayoría de las chicas tunecinas con las que me crucé no llevaban velo. No podemos olvidar que en muchos países árabes las mujeres luchan por el derecho a no vestirlo. Pensar que se es más musulmana por usarlo también es un estereotipo. Al fin y al cabo su misión es la de ocultar». Boix, coordinadora también de Mujeres en Red, añade: «La comunidad musulmana en España es una de las más conservadoras. Lo importante es que lo que hagan sea con autonomía». Yashmina Shawki, periodista gallega hija de padre kurdo, apunta: «Conozco a mujeres integradas y sin velo. Si lo ponen tan jóvenes creo que no se trata de una elección propia».

La hora de descanso se va terminando. «La verdad es que no quiero casarme, sería como si me cortaran las alas», se le escapa a Salma. Tiene las ilusiones de una chica de 20 años. Quiere hacer un máster en Relaciones Internacionales. Nassima la observa mientras habla. Su sueño es seguir aprendiendo idiomas.

3/4/15

Diputad Daniela Castro en el HCDN







Publicado el 19 de nov. de 2014


La diputada nacional por San Juan, Daniela Castro, habló en la Sesión que trató el proyecto de Ley del Acuerdo Comercial entre Argentina y Kuwait. Señaló las características y los beneficios de este acuerdo.

Viaje de la Diputada Daniela Castro a KUWAIT




Diputada Daniela Castro VISITA A KUWAIT

Estuve en Kuwait donde me reuní con funcionarios de diferentes instituciones que pueden beneficiar a la Argentina y, en especial a San Juan. Tratamos diferentes temas, como que nuestro país siga teniendo la posibilidad de tomar créditos a tasa reducida del Fondo de Desarrollo Kuwaití. Además analizamos conjuntamente campos científicos comunes a San Juan y ese país árabe para desarrollar proyectos de pronta ejecución. También hablamos sobre intercambios culturales de estudiantes y la posibilidad de que científicos argentinos trabajen allá.